Teoría de cuerdas

Y todo, fue por ella.
Aun sin saberlo, aún sin amarlo, todo fue por ella.
Quizá incluso cuando me negué a admitirlo, y es verdad que fueron muchas veces, todo fue por ella.
Sea en el cenit o en el declive, cuando siento y cuando peno, siempre tuvo que ser por ella.
Aún cuando lloré por otra, también lloré por ella.
Aún cuando sentí placer, también pensé en que ojalá fueras ella.
Y es que ella es el reflejo que debería sentir cualquier yo, pues no hay yo sin ella.
Que las ausencias fueron en ella, que las fuerzas salieron por ella.
Y todo, fue por ella.
Porque ¿por qué no ella era el porqué?
Ojalá saber quién es ahora mismo ella.
Ojalá en el devenir me hubiera premiado con saber cómo está, cómo estás.
A veces solo sueño en que te encuentro, te entiendo y me enmiendo.
Por todo el daño que hizo ella.
Que somos ingratos nunca será un aplique, que nos traiga la suerte el bien volver a verte. De lejos.
Pues en nuestro inferir nos perdemos en nuestra esencia, sentida de ti, por ella.
Que las decisiones nos componen, pero para siempre me alejaron de ella.
No me atrevería a que supiera de nuevo que existo, pues ella merece ser libre. Tú.
Que derive en la esencia y que disfrute el minuto, ojalá.
Que ojalá no sentir que está mal y alegrarme de que todo va bien.
Que es entender en deconstrucción el que nunca amaremos poseyendo.
Que la fuerza, el ejemplo, las ganas, la vida, el alma, los besos, las despedidas, las lágrimas, las risas, los llantos, ¿dije ya"la vida"? Da igual, son solo por Ella.
Porque siempre echaremos de menos, está bien, el inconformismo nos ha traído aquí.
Pero no nos dejemos en la queja, sostengamos nuestras propias guerras civiles, que morir por anomia siempre es mejor que por la duda.
Ella eres tú, soy yo, que el que escribe también, que nos hemos odiado, amado, deseado y desprestigiado, pero siempre seremos Ella, porque probablemente eso sea lo que tengamos en común. Y yo doy gracias por ello. Por todo lo que nos une, por todo lo que nos aleja, y por el punto medio en el que nos encontramos, en el que elegimos la dirección cada vez que tomamos una decisión. No olvidemos que nuestros antiguos amigos son personas que han tirado hacia lo que nos une, o hacia lo que nos aleja.